Josh Acosta, pega duro.

Texto: Noelia Baldrich /Fotos: Josh Acosta/

Tú no sabes cuánto este músico tinerfeño está gustando con su pop urbano. Tan joven como unos 23 años, un aspecto de modelo desenfadado y un ritmo latino tropical que emborracha a las pistas y a las niñas. Os diré que sus sencillos vacilan de grandes productores como Kiko Rodríguez Dbruz, y de colaboraciones de afamados ingenieros como Benny Stelee y Tom Coyne. Muy buenas vibras para un cantante y compositor que dejó el calor de las Canarias y aterrizó en la capital con un firme propósito “mamá quiero ser artista”. Fue con 8 años cuando la música lo atrapó, y el atrapó la guitarra, el piano, el bajo, la batería, hasta el ukelele, y acabó licenciándose en producción musical por “Griffindor” a lo Harry Potter. Después, ha ido pintando horas de estudio y grabación y los mágicos resultados se han plasmado por arte de visualizaciones. Su primer sencillo no pudo ser más fresco y pegadizo Tú no sabes cuánto, una fiesta a lo carpe diem, a la que siguió Quiero tu calor y que se prolonga ahora en un nuevo hit. Fuerza de vida, pura adrenalina. Tras escuchar su atractiva propuesta, locas no tiene Josh Acosta con su Loco por ti (2017, M2MusicGroup).

Loco por ti, ¿por qué anda loco Josh Acosta? 

¡Uf! Estoy loco por muchas cosas. Loco por la comida, por la fiesta, por las chicas, ja,ja. 

Y ellas locas por ti.

¡Dios, lo quiera! ja,ja.

(Vídeo resumen)

¿Tú ya sabes cuánto está gustando Loco por ti? 

Todavía no llego a ser consciente del todo porque cada día me llevo más sorpresas y buenos resultados, sobre todo, interacción en las redes sociales, en medios de comunicación, y se agradece muchísimo. Con el primer single Tú no sabes cuánto quedé bastante contento porque fueron más de 140 mil reproducciones en un año, pero este lleva cuatro meses y ya está alcanzandolo. Se agradece muchísimo, también, ver la evolución. 

¿Qué tienen los dos singles que golpeen duro? 

No sé si hay clave para el éxito, intento que gusten a la gente pero creo que el secreto en la música, como cualquier otro oficio, es el hacer las cosas con cariño y dedicación. Si haces lo que te gusta da igual dedicar tres horas, seis o mil. 

Letras tuyas.

Sí, generalmente suelo componer yo. Por ahora, todo lo que he lanzado es mío pero quién sabe si en el futuro saque alguna producción no compuesta por mí. 

¿Qué porcentaje de éxito asegura trabajar con grandes productores de la talla como Kiko Rodríguez Dabruk y Emilio Mercader? 

Me han ayudado a conocerme un poco más como artista. Cuando comienzas la lucha de cualquier artista es encontrarse a sí mismo, encontrar tu personalidad. 

Dos videoclips muy atractivos, gustan mucho. 

Sí, el primero Tú no sabes cuanto, es un poco más casero porque quería transmitir fiesta entre amigos, nunca seremos tan jóvenes como hoy, un carpe diem, vamos a vivir el momento. El segundo fue mas preditado. Vi a Saots, de Tenerife, contacté con él y me fui allí a grabarlo. 

Muy tropical con tus camisas. 

Sí, la idea del estilismo la propuse yo. Al principio lo vieron raro pero después les fui encaminando. Vi la camisa perfecta, ambientada en un clima tropical y estábamos en Tenerife. Después, también, les convencí en aparecer con gafas. 

A las fans las tienes loquitas, ¿cómo las llamas? 

Bueno, loquitas no sé. Empecé llamándolas "poyete", pero he tenido problemas en redes sociales y medios porque me preguntaron si mis fans eran poyetes cómo serían las fans chicas, y claro el rollo se escapó… No sé si llamarlas "joshers". 

¿Qué dice máma? 

Está muy contenta y me apoya al 100%, machacándome para que mejore cada día, corrija mis errores y ayudándome a luchar por mis sueños. 

¿Qué conexión familiar tienes con Latinoamerica?

Casi toda mi familia emigró a Venezuela, Argentina, México. Con los años regresaron unos y otros se quedaron allí. 

¿Te ha influenciado en tu vena artística?

Sí, porque al fin y al cabo uno vive en casa las costumbres de allí. La comida, la música..., hay una mezcla de culturas de las que me he empapado porque las he vivido en casa. He crecido comiendo arepas, comida venezolana… 

¿Qué diría tu abuelo si te escuchara?

¡Uf! No lo sé, espero que estuviese orgulloso de mí. 

Conocemos singles muy enérgicos y vitalistas, pero hay también un Josh más romántico, Quiero tu calor, ¿vamos a conocer nuevas facetas? 

Sí, se están preprarando nuevas cosas. Estoy trabajando con un productor de Colombia y va salir un sonido más urbano, va ser un cambio bueno, a la gente le va gustar. Cada tema tiene que tener su personalidad, van a venir cosas chulas. 

Has sido inscrito en los Latin Grammy para el 2018, ¿qué te gustaría que sucediera?

¿Qué espero? No pienso tanto en el futuro, pero si me pregunto cómo me vería dentro de cincuenta años, me veo en la música haciendo lo que me gusta, sea en el Madison Square Garden, frente a miles de personas, como en un bar tocando la guitarra. Por tanto, no me planteo más allá del día a día. 

¿Dónde disfrutas más en un gran escenario o en uno más íntimo? 

Depende del momento y cada uno tiene su parte buena. En el pequeño escenario te sientes más arropado, notas más el cariño de la gente, estás como en casa con los colegas, es más cercano. 

Un músico recogía una frase: "Hacer el amor es hacer sexo en acústico". 

Ja, ja total. Y lo bueno de los grandes conciertos es que te entra un subidón de adrenalina que flipas. 

¿Con qué instrumento compones?

Tengo un piano en casa, pero suelo componer más con la guitarra. 

¿Trasladarte a vivir a Madrid, ha supuesto un cambio en tu composición? 

Creo que no, más que el lugar han sido las vivencias. Mi música ha cambiado porque he vivido un proceso de cambio, que al principio no ha sido fácil porque cuando llegas a un sitio nuevo prácticamente comienzas de cero. 

De todas las vivencias recientes ¿cuál destacarías? 

No sabría decir, pero algo que me sorprende muchísimo y todavía no llego ha asimilar es hacer una quedada en Gran Via y de repente, en una ciudad con tantas distancias, aparezcan decenas de personas. Se agradece muchísimo. 

Unos cuantos tatuajes. 

Este ojo tatuado, es raro, porque es el único no tiene significado, lo vi y me gustó. Supongo porque el ojo es la parte de la persona que más transmite, más expresa. 

¿El más especial? 

Tengo especial a este, Pedro. Fue el padre de un amigo que me acogió como si fuese mi padre desde muy pequeñito y me inició en la música. Falleció hace tiempo, pero lo sigo teniendo aquí tatuado, acompañándome. 

¿Ya has escrito un tema sobre las historias que acontecen en un banco? 

¡No! ¿Cómo encuentras estas cosas? Todavía no pero lo tengo pendiente. La cantidad de historias que pasan durante un día en un banco, desde una pareja de ancianos, de enamorados, una discusión, la soledad… Es una pasada, lo que pasa es que es una letra que me tendría, tal vez, que ayudar Joaquín Sabina, porque es bastante complicada ¿sabes? (risas). 

Para acabar ¿alguna colaboración? 

No sé me gustarían muchas, por ejemplo un artista que me gusta mucho es Sebastian Yatra, Luis Fonsi… hay muchos. Tampoco descarto ninguna colaboración porque me gusta tanto la música que me gustan todos. Todo lo que sea música se acoge con ganas. 

Las radios te están acogiendo muy bien. 

Si Europa FM, sonaba ayer, además, por sorpresa. Y otras radios que estamos ahí, dándole caña. Pegando duro. 

Y tu pizza preferida. 

¡Uf! Por esto puedo perder followers. Me gustan la pizzas con piña. 

La tropical, la hawaina, muy en sintonía con tu música. 

No sé, pues he tenido unas discusiones porque me gusta la pizza con piña. Si es que voy con los canarios, ja, ja.

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