LYA, mezcla de canela y sal.

 Texto: Noelia Baldrich/ Fotos:LYA/.

“Tengo una vida entera lista para darte, y mi amor para ti tengo mil Detalles que guardé sabiendo que algún día te iba a tener a mi lado”. Ese día ha llegado y ahora nos tiene a su vera para presentarnos su cuarto trabajo. Un volumen Nómada, transfronterizo, entre el flamenco-pop, el funky y música latina que revela con una brillante voz, de afinados melismas de canela y sal, un trocito de mundo. Una obra de orfebrería instrumental, de colorida percusión y de cantautoría personal y singular. Pero es que la historia de esta cordobesa de raíces flamencas pero ramificación diversa es cuanto menos peculiar. Su abuelo le imprimió las grandes copleras y ella, con significativas dotes, las imitaba en el salón con un peine en mano y un pellizco de voz. Pronto llegarían las clases de canto y, a poco tardar, se acoplaría como corista de grandes artistas: Pastora Soler, Joaquín Cortés, Queco, entre otros. Hasta que llegó, como un Ángel en el camino, el de El corazón partío, Alejandro Sanz. La escuchó como de refilón y pensó: ¿Y si fuera Ella la nueva artista revelación? Así que no la hizo sufrir, la apadrinó, le editó sus dos primeros discos El pellizco de tu voz (2010) y De colores (2012) y la lió en dos de sus giras. Era lo Más y ella lo recogía en su Melodía: “Cantando por este camino donde me puso el destino un regalo sin igual”. Dos de sus sencillos, Un laito de tu cama y La vida es bella, regalaban el arte de su caminar, su propia acuarela musical. Con su tercera entrega Así lo siento (2015), dio un paso de gigante para Ser feliz: se autoproduce, acaricia nuevas texturas, se dueña de todo a su alrededor, y el puzle encaja: desde Rycardo Moreno, Los Mellis, Josemi Carmona..., un elenco de artistas pasan. Ahora encaja su cuarta referencia y Sinceramente las referencias son de lo más buenas. Como hoja del viento se deja llevar por canciones que dan cobijo, Solo pienso en ti; otras que calan, Amor de rosas; otras, palpitan Temblando, y las hay que brillan como El poeta de la luz, en la que colabora su hija Alba Molina. Pero es, sin duda, en la última pieza cuando el corazón se nos parte, la voz se quiebra, y el teclado de Tony Romero nos golpea. Lágrimas de guerra y sal nos trae el recuerdo de Aylan, el niño sirio muerto en las playas de Turquía. Un disco profuso también en colaboraciones: María Toledo, Sorderita, Andreas Lutz, Lin Cortes, sin faltar su Toto del corazón, y Juanjo Martín su co-productor. Todo para Poder desnudar vivencias que van de corazón en corazón y que LYA lía con Detalles que guardé (2016). 

LYA, la has liado con Detalles que guardé. 

Eso es lo que pretendía, liarla un poquito. 

Da la impresión que es el colofón, la guinda, de tu tercer trabajo Así lo siento. 

Pues sí, es un disco muy completo de cosas que teníamos guardadas y que tenían que salir, cosas nuevas que hemos escrito. Tiene muchos detalles y muchas personas que lo hacen especial. 

(Entrevista y acústico)

Muchos detalles sonoros, riquísima instrumentación y cada pieza con personalidad propia. 

Sí, y en cuanto a la composición es de temática variada. Hay amor, desamor, un tema dedicado a Manuel Molina, otro sobre los refugiados… 

Toto, productor y guitarrista, un disco muy lucido. 

Toto: Sí, hemos puesto todo el corazón y el alma para que el publico lo disfrute. 

Grandes colaboraciones. 

Hemos contado en las guitarras con Diego Morao, Rycardo Moreno… 

Y ecos árabes en el single Detalles que guardé. 

Sí, con Aimar Boumaret. Nos gustan mucho los sonidos árabes, y cuando Tony Romero le dio la vuelta nos sonaba así y decidimos meterle una pincelaita árabe. 

Metiendo al ex componente de O’funkillo, Andreas Lutz, y el gipsyflamento de Lin Cortés, el resultado es una sonoridad muy abigarrada. ¿Qué relación tenías con El poeta de la luz, Manuel Molina?

Lo conocimos dos semanas antes de que falleciera. Admirábamos mucho su música y conocíamos a su hija, Alba, pero personalmente nunca habías coincidido con él. Cuando nos enteramos que estaba malito quisimos irlo a conocer. Fuimos a su casa y ¡uf! Fue un día que no olvidaremos en vida, con los sentimientos a flor de piel. A las dos semanas falleció y al volver del entierro nos pusimos a componer hasta las seis de la mañana, cuando terminamos la canción. Aún se me ponen los pelos de punta recordándolo.

LYA y Toto dos corazones unidos por el amor que confluyen en un mismo trabajo.

Sí, y sentimos de una manera muy parecida, sabemos expresarnos de forma similar tanto para los temas como para la vida en sí, nos compenetramos bien.

¿Os habéis compenetrado tan bien en todos los detalles del disco?

Sí, para mí ha sido un cambio que esté Toto en la producción y la composición de los temas. Él es más flamenco y me aporta ese punto que me faltaba a mí en la producción y composición. Yo compongo más pop. Me ha facilitado el trabajo, todo surge mejor.

Temas compuestos en solitario, a dúo, o con más autores, pero que en la mayoría derraman Amor de rosas.

Sí, es lo bonito porque si nos vamos de rosas (bromea).

Refleja que La vida es bella para LYA, ¿es así, no?

Sí, exactamente los discos son un reflejo de cómo me siento, y a Toto le sucede lo mismo, escribimos lo que nos sale del corazón.

¿Qué flores representan para LYA el amor?

El amor no son flores, se tiene que demostrar día a día.

Pero también son pequeños detalles.

Sí, si no es una rosa es una canción que habla de rosas.

Hay cortes de otra temática como Nómada.

Habla de la vida nómada de los artistas, estamos un día en cada sitio, conocemos a mucha gente, tenemos mucho sentimiento… es un poco nuestra vida.

LYA ha sido nómada de compartir escenarios con muchos artistas. ¿Qué has aprendido?

Intento aprender de todos los buenos. He cantado con Niña Pastori que es uno de mis grandes referentes. El otro día cantamos juntas y me encanta su aplomo y su manera de cantar. Con Alejandro Sanz he estado dos giras de telonera y he aprendido mucho de la producción de conciertos.

Era uno de tus sueños conocerlo, ¿has llegado a cantar algún tema con él?

Canté con Alejandro en un programa de Navidad para TVE, pero no se emitió. Ha sido la única vez que he tenido la oportunidad de cantar con él. Fue el tema Cómo decir sin andar diciendo. Me dio mucha rabia que no lo pusieran. Con Joaquín Cortés también he estado, con Pastora Soler, un pedazo de artista, estuve tres giras de corista con ella, con David Bisbal he cantado, con David Barull. De todos se coge algo.

A todas o a ninguna.

Sí, con Kiko Gaviño, la compañía nos propuso cantarlo juntos. 

Y en un rincón de tu pecho llevas a José Carlos Gómez.

Sí, es un tema de su disco, hicimos un vídeo y ha gustado mucho a la gente, tiene muchas visitas en YouTube.

Por eso recoges en tu Instagram “La música no es un deporte para competir sino un arte para compartir”. 

Así es. A mí no me gusta competir sino compartir música y sentir con los demás y que sientan conmigo. Es lo bonito, todos somos distintos y tenemos algo distinto y especial.

Lo diferente es que tu no vienes de familia de cantantes.

A mi abuelo le gustaba, ponía música pero no cantaba. Nadie, nadie de la familia.

Tú en el salón de casa imitando a las copleras con un peine.

Sí, es verdad (risas).

Pero ¿entonces que te une a Parrita que te llama mi sobrina LYA?

Mi tío Parrita ja, ja. Es un trato de cariño, de respeto, pero no es de sangre, ¡ojalá! 

Pero sí que has subido al escenario con él. 

Sí, me invitó a su concierto en Córdoba y canté con él No me lo creo.

Le devuelves la invitación en el concierto del día 10 noviembre, en Barcelona, en la Sala Catwalk. ¿Qué vas a ofrecer a los “lyantes” y “lyantas”?

Sí, está de artista invitado. Tambien nos acompaña Rycardo Moreno, guitarrista de estos dos últimos discos, y Mara Rey, sevillana, un torbellino que canta muy bien. Va ser una noche muy completa. A parte de presentar el disco, hacemos los temas más reconocidos de mi carrera, luego canto por rumba para que la gente baile y se divierta. Vamos subiendo de intensidad el concierto.

Conciertos que te llevan el 11 en Tarragona, después gira por otras ciudades y en enero vuelves a la Ciudad Condal?

Sí, estaremos de gira por Madrid y otras ciudades y luego volvemos.

Un buen jaleo con canciones muy emotivas como la que cierra el disco Lágrimas de guerra y sal, a voz y piano.

Es un tema que hay que hacerlo así, no necesita más instrumentación, es lo que hay que decir y es lo que se tiene que escuchar. Lo compuse tras ver en las noticias la historia de Aylan, y me llego tanto… que yo, que no toco el piano, esos días me llegó el de un amigo y empecé a tocarlo a ver que salía y con los tonos surgió el tema. Tenía que escribirle como me sucedió con el tema a Manuel Molina. 

Toto: Hay que concienciar a la gente de este tema tan delicado. No puede ser que por motivos políticos, por lo que sea, mueran miles de personas en el mar.

Donarás los derechos por la causa.

Exactamente, para ayudar un poco, todos tenemos que poner nuestro granito de arena. 

¿Qué te aportado María Toledo ese huracán que llamo “la paloma blanca” del flamenco?

He hablado con ella que también está por Barcelona. Es una locura, un niña muy buena. Quería que estuviera conmigo porque desde que empezamos las dos en la música nos llevamos muy bien y con India Martínez. Nos llamábamos las tres mosqueteras. 

¿El número 23 por qué?

Tal vez porque nací ese día, no sé por qué. Es mi número de la suerte.

El amarillo, ¡no!

No, pero no, no, nada. Es una tontería pero no se que me pasa, en la vida me vestiría de amarillo y es de unos años para aquí. No sé, me he vuelto supersticiosa.

¿Alguna superstición antes de subirte al escenario?

Pues eso, no al amarillo. Entrar con el pie derecho, no pasar debajo de una escalera, o un andamio…

Con un álbum de tan amplias miras ¿contempláis la posibilidad de hacer las Américas?

Es uno de mis anhelos ir a Miami.

Toto: Hace falta el respaldo y el apoyo de alguien de allí porque no es fácil. 

¿El jefe, Alejandro Sanz, lo ha escuchado? Se le podría hacer llegar.

Pues no lo sé si lo ha escuchado, la verdad. Sé que este tipo de música puede gustar fuera y nosotros encantados, nos encantaría. Está abierta la contratación, llamadnos.

Habéis grabado dos videoclips Amor de Rosas y Detalles que guardé.

Sí, Detalles que guardé lo grabamos en el puerto de Málaga y es muy bonito. Y Amor de rosas en Córdoba.

¿Ha quedado algún detalle para el quinto?

Toto: Ya estamos trabajando en ello, estamos dándole vueltas.

Habrá que darle muchas vueltas para superar este.

Toto: Totalmente, cuanto más discos va sacando más nos tenemos que exigir para darle más al público.

¿Qué os gustaría que ocurriera con este disco?

Toto: Lo que está ocurriendo ya, la gente valorándolo pero con la ayuda de más público y llegar a más corazones.

LYA: Sobre todo también que las radios apoyen la música con deje flamenco, que es complicado. Que a la gente le gusta.

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