domingo, 15 de noviembre de 2015

El KANKAutor del buen Karma



Texto: Noelia Baldrich/ Fotos: El Kanka







Con el permiso de ustedes voy a acusar a este cantautor de superar la perfección, porque cuando suelta su canto un soplo de aire fresco nos hace sentir Lo bello que es vivir. Con evocar su primer disco Lo mal que estoy y lo poco que me quejo (2013) se hacen ya una idea del Dr. Desastre que habita en este peculiar músico malagueño. Contra todo pronóstico, ahora no viene a pelar la pava, ni a vender la moto, ni a vacilar de canción. Y no es por Joder la marrana pero su estilo ecléctico con pinta de alegre bandolero sigue trayendo un cancionero que cura el oído y alegra corazón. Hasta aquí todo normal, lo raro viene cuando nos adentramos en su nuevo disco, es un punto y aparte y tela marinera, aunque no le guste ni el macramé ni la franela. Yo lo definirá con los títulos de uno de sus referentes musicales La Cabra Mecánica: es Carne de canción y Cuando me suenan las tripas me doy un atracón de su son. No es mi intención hacer una caricatura de su perfil pero hasta para nombrarle me suena un Refunk, en el que me sobran vocales y consonantes pero no encuentro términos para abordarle. Sus juegos de palabras desdibujan la caligrafía de mi Word y hacen tartamudear hasta el ratón. Le gusta cantar mientras te mira de frente y sus letras no riman gato por liebre, ni se disfrazan para la ocasión, son malabarismos de humor, ironía y desacato de autor. Poesía que se atrinchera en una prosa llena de rima con tu vida y la mía. Canela en rama espolvoreada con el placer de la Felicidad y al compás de la alegría. “Ay vida mía, es lo que hay Llámame fino pero si no te gusta cambia de acera, que no me asfalten el camino, mejor camino a mi manera”. Se nos ha puesto algo chulito pero, aún así, Me gusta el descaro de este prenda que estuvo “Más solo que la luna”, hecho una T de Trapo y ejerciendo de Pierre Nodoyuna. Y sin embargo, ahora llena las salas y más de uno Querría su filosófica pluma nietzscheana. Le sobran las clases, los cursos del INEM, los títulos y hasta el carné porque De los errores se aprende y lo que Pudo pasar, pasó, pero hizo los deberes y llegó El Día de suerte de Juan Gómez (2014), un fangal de crowdfunding y mieles. Su tercer disco es un manual de vida vertido por la insana locura de un cuerdo que eligió la senda del error para componer sus aciertos. Procuro acomodar mi escrito a su singular talento pero me falta los acordes de sus tropiezos. Así que Ante la duda de esta introducción no se queden Con las ganas de escuchar su Canción final o Instrucciones para bailar un vals. Ahora que el amor se ha puesto de moda acérquense a este álbum que traducido en prosa más prosaica podría resumirse como “una cosa loca”, con sones latinos, que responde a las suplicas del corazón. Es Para quedarte boquiabierto. Y como no quiero dejarme nada en el tintero veo que el trovador no se ha disfrazado para la entrevista, viene con su mejor traje, el de Kankautor. Viene el Kanka De pana y rubí (2015, Maldito Records).


Portada De pana y rubí, el tercer disco de El Kanka.


Lanzas el disco en viernes 13, no sé si es El día de suerte de Juan Gómez pero ¿y de El Kanka?
Ja, ja, esperemos que sí, que nos traiga suerte. Es que no soy absolutamente nada supersticioso, me da igual sacarlo en viernes 13, martes 14... Pura coincidencia.

¿La suerte llama a la puerta?
No creo incluso ni en la suerte, es cuestión de actitud, siempre. En la vida te van a ocurrir cosas buenas y malas, te van a llegar oportunidades y te van a pasar putadas, “la suerte” consiste en saber aprender de los reveses que te da la vida y en saber coger los trenes buenos que pasan. Al final creo que es más importante eso que una cuestión de mera casualidad.

Oye prenda, De pana y rubí ¿no crees que es una pena que el talento, el rubí del cantautor, tenga que cubrirse muchas veces de pana?
Ja, ja, es una buena pregunta pero, además, creo que afortunadamente o desafortunadamente, no lo sé, los cantautores ya no se visten tanto de pana ¿sabes? Creo que hay un cantautor distinto, hoy en día, y hay que quitarse ese concepto de lo antiguo del cantautor. Hay mucha gente y me incluyo que estamos haciendo cosas distintas.

¿Has conseguido pasar del alquiler de un semisótano de 50m a ser el niño de la hipoteca?
No, no, que va, todavía no me atrevería a ser niño de hipoteca. Y además, he de decir que fueron muy generosos cuando dijeron 50m (risas) no los tenía ni de broma.

Incluyeron el rellano.
Ja, ja, efectivamente (risas). Ya vivo en una casa un poquito más grande, eso sí es verdad, pero de alquiler.

¿Y cómo consigue uno cumplir con el deber del Kankautor, viviendo, a veces, con la insoportable levedad de un sueldo, sin caer en la tentación de hacerse comercial?
Yo no creo que no sea comercial, creo que tengo un punto comercial, pero tampoco sabría hacerlo de otra manera. Ni sabría hacerlo, buscando algo que no me satisficiera como artista en el tema de la composición, ni tampoco me lo planteo. Aún así, mira, parece que con lo que voy haciendo, que es exactamente lo que me sale de los huevos, me va funcionando la movida.


Imagen de Juan Gómez, El Kanka.   


¿La economía de banquero no te seducía?
No, no mucho. No me gustaba ni un poquito. No sé, estaba idiota porque tenía 18 años, incluso estaba más idiota que ahora, ja, ja, me metí por ese camino sin tenerme que haberme metido, porque yo estaba allí como un pez fuera del agua, absolutamente.

¿Tampoco la Filosofía?
La filosofía me interesa muchísimo más. De hecho, creo que no se puede tener dos dedos de luces y que no te interese un poco la filosofía. Al final, es la búsqueda de respuestas, la búsqueda de la verdad. Me interesaba muchísimo más, de hecho de Económicas cursé un año y de Filosofía, cuatro. Sí que me motiva, pero si he venido hacer algo en esta vida creo que, al final, ha sido la música, que es lo que mejor se me da.

¿Pudo pasar que teniendo los libros cerrados se te cruzó el destino?
Ja, ja, ¡no! simplemente los he ido abandonando teniéndolos incluso abiertos. En Económicas algo aprendería ¿sabes? Y, obviamente, en Filosofía aprendí muchísimo y me encanta, y seguro que algo de eso utilizo para mis canciones pero, simplemente, se fue imponiendo casi por sí solo, fue cayendo por su propio peso el hecho de que me quería dedicar a la música y que se me estaban abriendo más puertas por ahí. Hasta que me dediqué, finalmente, a ser músico vagabundo.

Un músico vagabundo con un bagaje económico que le sirvió para un exitoso crowdfunding en el segundo disco El día de suerte Juan Gómez?
Sí, sí.

Te administras bien.
No, yo me administro bastante mal, lo tengo que decir. Pero lo del crowdfunding es una idea buenísima de los tiempos que corren, mediante la cual la gente puede financiarse un disco aunque no tenga dinero, que era mi caso. Yo no tenía ni un duro, pero tenía fans y entonces dije: “¿Oye chavales os interesa que saque un disco, me lo vais pagando y luego yo ya os voy mandando cosas luego?”. Y bien me salió.

Tan bién te salió que para este tercero no has tirado de pana, viene revestido de rubí.
Bueno, la verdad es que no he tenido que recurrir al crowdfunding.

Defines De pana y rubí como “una cosa loca” producida por Carlos Manzanares.
Es un crack, ha hecho muchísimas cosas, es saxofonista de El niño de la Hipoteca, es brillante y tiene un oído privilegiado. Me interesaba mucho porque tenía ganas de hacer algo con una banda más grande que incluyera vientos y él es arreglista de vientos también. ¡Es que lo toca todo!, es un tío completísimo. Flipaba. Toca el piano en un tema, el acordeón en otro, el saxofón lo toca en todos, lo ha dirigido todo, obviamente de acuerdo conmigo, lo ha masterizado él, es como un hombre del renacimiento pero a día de hoy. Y excelente cocinero, hay que decirlo, hace unas paellas que te mueres. Es todo un descubrimiento en mi vida y buenísima gente. Es amigo y hemos trabajado con mucho cariño en el disco.
Mezcla estilos muy diversos, hasta ska, para vestir letras conceptualmente diferentes. 
Es mi evolución como persona, estoy un año y medio más maduro respecto al anterior disco. Si hay que destacar algo es que en el segundo había descubierto mucho mi persona, había hablado mucho de mí; el primero era más caricaturesco; y en este tercero estoy mirando más a mi alrededor, canciones que hablan de la vida y de la muerte, temas más filosóficos, más universales, incluso los temas de amor no son especialmente vivencias, algunos sí, sino que es más una observación desde fuera sobre el amor, la amistad... Estoy más filosófico, mirando más alrededor y no a mí mismo.


El positivismo del malagueño le ha valido la etiqueta del 
 cantautor del buen "rollismo".
Un manual de instrucciones de vida, pero siempre positivo.
Sí, me da hasta coraje (risas).

Tanta felicidad debe ser cuestión de psiquiatra, porque de Nietzsche no me cuadra.
Bueno, Nietzche era muy vitalista, pese a lo que se cree de él. Venía de los existencialistas de Schopenhauer, que eran unos pesimistas de cuidado.

El Nihilismo. 
Claro, pero Nietzsche rompió con todo eso, era un vitalista a muerte, por eso me gusta. Yo también lo soy, pero me da coraje porque tampoco me gusta el buen rollismo por el buen rollismo. Tengo mis miserias como todo el mundo, tengo mis días malos, pero sí que es cierto que en la obra, como en la vida, soy bastante constructivo, me gusta pensar que incluso lo peor que me pase si lo sé enfocar bien, si lo sé superar, al final es un aprendizaje, soy mejor persona, capaz de enfrentarme a más cosas, y tengo ese rollo. No me gusta cuando escribo canciones recrearme en la miseria. Si me pasa una cosa chunga trato en las canciones de darle la vuelta y tirar de la fortaleza que me ha hecho superarlo. A mí me gusta eso, después, cuando tengo un día malo también escucho canciones de compositores que les gusta recrearse y lo plasman muy bien, es fantástico eso, y es preciosa muchas veces. Pero a mí no me gusta y no me sale. Incluso el tema que tengo Canción final, que habla de la muerte, ha acabado siendo un canto a la vida. Hasta yo mismo cuando la compuse dije: “Quillo es que me ponen la etiqueta de buen rollista y con razón”. Es que no soy capaz de ponerme triste.

¿Qué acordes le salen a El KanKa tras ir a cantar al centro penitenciario Puerto 3?
¡Uh! Los mismos que antes pero fue muy bonito, la verdad. Iba con mucho miedo porque quería empatizar con los internos que muy pocas veces sale de los módulos y cuando lo hacen les mola mucho. No sabía si iba conseguir meterme en su rollo, porque son gente con la que no suelo tratar. Con un "culturetilla" de 30 años occidental es muy fácil que yo empatice pero con unos internos que llevan más de diez años dentro, no lo sabía… y creo que lo conseguí. Acabé cantando con dos que se subieron conmigo al escenario, cantando por bulerías y yo acompañándoles. Me fui lleno de alegría.

Y dejaste notas de alegría.
Creo que sí, es que era mi misión allí, no iba para otra cosa. Lo único que tenia hacer allí era, el ratito que ellos salían, ofrecerles una actividad que se lo pasaran bien, y creo que así fue.

¿Con qué realidades empatiza El Kanka que lo dejan sin palabras?
Qué me quede sin palabras… ¡pues anda que no hay! Realmente está el mundo hecho un poquito un desastre. El tema de la pobreza extrema es lo que me jode del todo. Los niños que les falta el agua, ya ni la comida, ¡que les falta el puto agua! y que se mueren de eso. Y además, me siento muy frustrado, incapacitado desde mi posición. Se podrá ayudar un poquito, pero siempre muy poquito.

Entonas la Canción final, pero ¿hay nuevos temas por abordar ¿no? 
No estoy trabajando ninguno, pero ya tengo uno para el disco siguiente. Ahora mismo en la cabeza no tengo nada más que la locura de este disco, con la promoción y la gira y estamos a tope, pero tengo un tema totalmente compuesto para el cuarto disco. Y esto me hace estar muy tranquilito porque ya me ha salido un tema y todo.

Te declaras contrario a la dama de negro.
Hombre la vida me gusta más, ja, ja. Es un poco una broma, obviamente, de la muerte no puede se puede estar ni en contra ni a favor, es lo que hay y gracias a eso la vida tiene ese sentido de única.

No hay pruebas.
Efectivamente, aquí no hay pruebas, una vez y ya está. Pienso así, soy agnóstico no creo en ninguna religión.

¿Ningún Dios vive en El Kanka?
Ninguno. La gente. Creo en la gente mucho, aunque hay mucho gilipollas por el mundo, pero al final hacemos el mundo. Viajas y todos los monumentos los han hecho las personas, lo más importante es la historia y el ser humano, un animal social. Hemos venido para estar con otra gente para comunicarnos, entremezclarnos y querernos.
   16 DE NOV. FNAC CASTELLANA MADRID
         17 DE NOV. FNAC MÁLAGA
           18 DE NOV. FNAC SEVILLA

El Kanka , en el FNAC de Barcelona el pasado viernes, día de lanzamiento de De pana y Rubí.




¿Cuantos Querría El Kanka con este disco?
Simplemente, seguir como hasta ahora trabajando en la música con este disco y con el siguiente y con el otro y el otro porque espero que vengan muchos más.

“Si me queréis venirse”.
(Risas) Efectivamente.

La gira ‘Más solo que la luna’, ironía de kankautor.
Sí, no ha sido premonitorio en ese sentido. El público está respondiendo muy bien.

¿Acompañado de tus músicos de siempre?
Manin (Juan Rubio) y Alvarito (Álvaro Ruiz) son como mis niños. Me acompañaran a partir del 2016 para la gira de presentación.

Con una gira con tantas fechas uno se somete A Dieta de Dietas o se atiborra más?
Yo soy de atiborrarme más. ¡Qué rica la crema catalana! ¡oh, qué maravilla! Me gusta muchísimo comer, es mi debilidad, me encanta. No sé cómo no estoy gordísimo, de ir rodando por la calle, ja, ja, porque me gusta muchísimo comer.

El piquito de oro de los cantautores enamora a muchas ¿ha sido alguna vez El Kanka Pagafantas?
Pues te puedes creer que no, pero no por nada, sino porque soy tan tímido que no llegaba ni a intentarlo, ja, ja.

Y cuando alguien se instala en tu vida para quedarse, ¿entran ganas de reproducirse?
Sí, claro que sí.

¿En qué piensas de lunes a jueves?
Pues también trabajo un montón. Hay muchas cosas que no se ven, pero ahora que estoy de promo de repente hay que grabar un videoclip, ensayar, grabar un disco. Todas estas cosas se hacen de lunes a jueves. Pocos días libres si lo cuentas todo. Si el trabajo es ensayar o dar un concierto es muy satisfactorio, pero hay mucho curro con todo.


Con su  gira 'Más solo que la luna' repleta de fechas, el kankautor se siente más que satisfecho.
 El 20 de Noviembre actúa en Murcia (Cafe Itaca) y el 21 estará en Albacete (Sala Chapo)






















Satisfacción, ¿pero te has quedado Con las ganas de algo?
La verdad es que no, y, además, en este disco las canciones nuevas que tenía las he metido todas, he rescatado una del pasado. En el disco físico son nueve más una, y hay una más para Itunes, De los errores se aprende.

Juan 
Gómez ¿tiene gato?
Me lo han preguntado. En una época de mi vida tuve una gatita con mi novia de entonces, pero no, no, yo no puedo tener un bicho, si es que estoy siempre fuera.

¿Cuándo ha sido la última vez que te has planteado Ante la duda, hazlo?
Esta mañana probablemente. Todos los días, me lo planteo, soy muy miedoso pero creo que hay que estar por encima del miedo.

Me gusta, dedicada a la mujer, ¿cómo te gustan?
Muy guapas y listas, por pedir, (risas). Me gusta que sepan "volar".

¿La invitarías a bailar un vals?
Claaaro, siempre, aunque bailo fatal pero no me importa. Me lanzo.

¿El error más acertado de 
El Kanka?
Meterme en esta extrañísima profesión que es ser músico, ese ha sido mi error más acertado.

La prenda de vestir con la que te sientes más cómodo.
El calzoncillo
, ja, ja, no. Desnudo es como mejor estoy (risas).

Rasgos mexicanos en las ilustraciones, ¿mirando a Latinoamérica?
Es que escucho muchísimo música de allí, sobre todo argentina y uruguaya, pero de todos los sitios de América Latina. Creo que de alguna manera las sonoridades de allí me las llevo a mi terreno, soy malagueño,y hago una mezcla del rollo de aquí y el de allí. A ellos les suena exótico por las maneras nuestras y se sienten identificados por las formas suyas. Creo que es una manera bastante acertada de definir mi música.



Tres días en Barcelona en que El Kanka no paró de conceder entrevistas, firmar discos y ofreció cuatro actuaciones.




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